BREIZHAN
Buenas tardes, Laila, nuestra conversación de ayer ha perturbado toda mi familia. Nos hemos dado cuenta de muchas cosas al respecto de Breizhan y sobre sus repetidos problemas de salud que creíamos consecuencia de su propia fragilidad.
Te doy las gracias desde el fondo de mi corazón por todo lo que vas a hacer por mi familia. Creo que vas a salvar a mi madre y que vas ha hacerle ver la luz al final del túnel. Un cordial saludo,
Angélique et Breizhan.
VOLF
Oí hablar de Laila en un stage canino. Había recuperado Volf un macho berger alemán adulto, decidí contactar para saber más sobre su pasado. Mi perro reaccionaba en exceso ante sus congeniares, lo inscribí en un club y trabaje mucho con refuerzos positivos, pero por aquel entonces los resultados no estaban a la altura de nuestro trabajo. A trabes de nuestras conversaciones telefónicas he descubierto muchas cosas del pasado le pasé de Volf que me han permitido poder comprender su actitud.
Poco después de esto mi perro se hizo una lesión en le dorso, lo quise palpar para cerciorarme de la zona en que le dolía, pero esto fue la peor tontería que pude cometer. Sin quererlo mi gesto recordó a Volf ciertos hechos pasados muy dolorosos. Me asoció con ellos y desde entonces rechazó mi contacto. Se lo conté a Laila; yo estaba desesperada y la situación se deterioraba y empecé a plantearme seriamente que no podía quedarme con el perro. Laila aceptó ayudarme. Desde la primera sesión empecé a ver progresos, mi perro aceptaba de nuevo que estuviera cerca, pero no habíamos aun reencontrado nuestra complicidad. Después de la 2º sesión las cosas aun mejoraron y el empezó a traerme sus juguetes. Necesitamos varias semanas para que las cosas volvieran a ser como antes, pero hasta el momento todo va muy bien. Nuestra relación se esta asentando, su comportamiento ha mejorado respecto a los otros perros. Ciertamente no es aun la esperada pero ya acepta jugar con ciertos perros y sobre todo puede concentrarse en el trabajo entre otros perros.
Nunca podré agradecerte suficientemente la ayuda de Laila.
~ Amélie, Francia
Abril 2009
PEDDLES
Mi perra Pebbles lo mordía todo: las colchas, los suelos de linoleum, la moqueta, las plantas y todo el mobiliario. Nada quedaba a salvo de sus dientes… Laila trabajó con éxito a Pebbles. Desde entonces solo muerde sus juguetes, Ya no tengo la necesidad de encerrarla o de dejarla en una protectora de animales. Para todos los que se encuentren en una situación parecida quiero decirles que HAY ESPERANZA ¡
~ Linda Clark, Los Angeles